No es fácil cambiar las cosas, y eso, el diseñador de calzado belga afincado en París, Mats Rombaut lo sabe bien.
Rombaut nos ofrece una filosofía de vida en forma de calzado. Con un diseño minimalista de líneas puras y sin artificios, sus zapatos están elaborados de manera artesanal en Italia con materiales biodegradables respetuosos con el medio ambiente procedentes de Uganda. Nos cuenta que no son buenos tiempos para diseñadores independientes que apuestan por nuevas formas de pensar y hacer. En So Catchy! nos ha fascinado su actitud ante la vida y la maestría con la que ha sabido aplicarla a la industria de la moda, consiguiendo un perfecto equilibrio entre innovación, belleza y respeto al entorno.
Mats Rombaut
SO CATCHY!: ¿Podrías explicarnos cómo un economista decidió dedicarse al mundo de la moda?
MATS ROMBAUT: No me definiría a mí mismo exactamente como un economista. Siempre he estado interesado en la moda porque es una manera de expresarse uno mismo, como un lenguaje. Es una extensión de la personalidad de cada uno, una herramienta para definirnos como un ser humano único. Siempre he sabido que quería tener mi propia compañía, así que pensé que sería de ayuda estudiar Económicas en primer lugar.
SC!: Cuéntanos cómo surge la idea de combinar diseño, sostenibilidad y materiales ecológicos
MR: Quería aportar algo a la industria de la moda de una manera que me pareció innovadora y con visión de futuro. Veía tantas marcas derrochadoras a mi alrededor que quería ayudar a cambiar la industria de la moda. Así que empezó como un reto, fabricando un zapato de origen vegetal 100 % para no comprometer los recursos de nuestro planeta. Quería trabajar con materiales alternativos, de forma ética, con el fin de hacer una declaración, para mostrar que se pueden hacer las cosas de otra manera.
SC!: Algunas personas piensan que la estética y el diseño no son compatibles con el uso de materiales respetuosos con el medio ambiente, ¿estás de acuerdo?
MR: No, no estoy de acuerdo en absoluto, pero tienes que ser más creativo y exigente.
Si vas a una feria de materiales, no vas a encontrar materiales respetuosos con el entorno porque las grandes compañías no los están fabricando en estos momentos. Conseguir este tipo de materiales y manipularlos para convertirlos en algo atractivo es complicado. Creo que sólo estamos en el inicio de la revolución ecológica, así que espero que pronto sea más fácil tener acceso a recursos sostenibles en el futuro.
SC!: Tu trabajo vas más allá del diseño y de la moda, es una filosofía, ¿a qué clase de público van dirigidos tus diseños?
MR: Oriento mi trabajo a un consumidor consciente e intelectual, educado en algo más que en las últimas tendencias en moda. Alguien a quien le gusta tomar una posición ante la vida.
SC!: Últimamente estamos oyendo hablar de moda ecológica o ecomoda , ¿qué significa este concepto para ti?
MR: La ecomoda se ha convertido en una tendencia y la palabra “ecológico” ha perdido su verdadero sentido. Las empresas ven en estos consumidores emergentes con “conciencia ecológica” una oportunidad para obtener beneficios y se aprovechan de ello. Sin embargo, esta “conciencia” se traduce en sólo palabras y en la comercialización, no en acciones. Algunas marcas comercializan sus prendas como “eco” porque esto tiene un toque “hippy chic” o porque un pequeño porcentaje de sus materiales es ecológico. Ahora los proveedores de materiales también se han subido al carro y utilizan como reclamo publicitario “piel ecológica” o “cuero natural biodegradable”, sólo para darle un toque de «sostenibilidad «, ya que en realidad todo el cuero es natural y biodegradable. Espero que los diseñadores se tomen tiempo para educarse a sí mismos respecto a los materiales y su origen, y también pienso que es importante ser capaces de distinguir entre diferentes conceptos como “bio”, «natural», «eco» y «sostenible», ya que son muy vagos y subjetivos.
SC!: ¿Cómo definirías tu trabajo?
MR: Yo lo definiría como algo contemporáneo, una nueva forma de rebelión.
SC!: En tu última colaboración con la firma Honest By vemos que los modelos van desnudos, sin artificios, pura esencia, como tu trabajo. ¿Qué has querido transmitir con esta colección?
MR: Los modelos desnudos fueron una idea de Bruno Pieters, porque quería mostrar la pureza de los zapatos. Al mostrar modelos desnudos, la atención se centra en los zapatos. Las posturas que toman son las propias de las estatuas. Queríamos capturar momentos naturales con una serie de hombres y mujeres fuertes, inteligentes y curiosos.
SC!: ¿Cómo aplicas el respeto al medio ambiente que vemos en tu trabajo a tu vida diaria?
MR: Como vivo en París, utilizo mucho la bicicleta o camino. También reciclo, no como carne, intento comprar productos “bio” tanto como puedo y suelo comprar tres prendas máximo al año… Son pequeñas cosas, pero estoy seguro de hacer cambios mayores en el futuro.
SC!: Hoy en día la sociedad está cada vez más concienciada y preocupada por conocer el origen de los materiales, los procesos de elaboración y sus efectos sobre la salud, ¿crees que se trata de una moda pasajera o estamos ante una tendencia que se mantendrá en el tiempo?
MR: Espero que esta inquietud se mantenga. En general, como consumidores, estamos tan desconectados del proceso de aprovisionamiento / fabricación / precio, que somos un blanco fácil para las campañas de marketing.
Después de un tiempo, tendemos a olvidarnos de las fábricas que se derrumban en Bangladesh y las vidas que se pierden en ellas porque nuestro “timeline” de Facebook nos satura de noticias irreverentes. Es importante que la generación actual tome conciencia y muestre la miseria escondida detrás de la cadena de suministro. De esta manera, no será una moda pasajera.
SC!: Tus prendas conllevan un proceso de fabricación bastante laborioso, ¿crees que la moda elaborada con productos ecológicos puede competir con la moda tradicional respecto a costes y precio final?
MR: Muy laborioso, de hecho. Hay dos factores que influyen en el precio final: los materiales y la mano de obra. La mano de obra que yo empleo es muy cara. Es como en el caso de la alta costura y el prêt- à –porter, la mano de obra y las cantidades son diferentes por lo que son difíciles de comparar. Pre -à -porter es siempre más rentable. También los materiales que utilizo son caros, por lo que de nuevo es difícil competir en costes.
Sin embargo, hay esperanza. Si el consumidor comienza a pensar de manera más sostenible, empresas como H&M se verán obligados a ofrecer este tipo de prendas. Los precios de los materiales orgánicos y sostenibles descenderán y serán capaces de competir con la moda tradicional.
SC!: ¿Que piensas de la situación actual de la moda y hacia dónde crees que está evolucionando?
MR: Para ser honesto, no tengo ni idea de hacia dónde se dirige la moda. Veo cómo firmas de lujo se han vuelto más poderosas ahora que dominan las redes sociales, ausentes hace un par de años. Son omnipresentes y dictan las tendencias y los gustos. Actualmente no es un buen momento para los jóvenes diseñadores independientes. En tiempos de crisis, los clientes acuden a lo conocido, apuestan por valores seguros.
Desafortunadamente, creo que esta actual «crisis financiera» es sólo una llamada de atención, el inicio de un cambio en nuestra forma de concebir las cosas. El lado positivo es que la gente va a ser más consciente de sus recursos, de su entorno y de cómo nos han lavado el cerebro respecto a lo que consumimos y cómo lo consumimos: la comida, la ropa, la música y otros entretenimientos. Es fácil quedar atrapado en esta zona de confort, pero no vale la pena. Espero que más personas con ideas para el cambio positivo (en la moda ) se pongan de pie y utilicen los principales canales de comunicación para difundir su mensaje.
SC!: Todos tus zapatos están realizados de manera artesanal, ¿por qué es importante para ti preservar la esencia del pequeño negocio?
MR: Es vital para la felicidad de las personas y la diversidad de la cultura. Cada fábrica de zapatos es diferente en tamaño, maestría, atmósfera… Con la crisis y la competencia del extranjero, muchas empresas han ido a la quiebra o han sido compradas por grandes grupos. Los patronistas especializados se han perdido, la gente se queda sin empleo y es un círculo vicioso. Si dejamos el poder en manos de grandes multinacionales, estamos dejando la toma de decisiones a accionistas que sólo se preocupan por recibir un porcentaje de los beneficios. Ellos no se preocupan por la vida del patronista X o porque la calidad de los productos haya bajado. La diversidad y el apego a las pequeñas empresas es clave para mantener un buen equilibrio.
SC!: ¿Te planteas diversificar productos?
MR: Sí. Voy a diseñar bolsos y otros accesorios próximamente.
SC!: ¿Qué diseñadores admiras y son fuentes de inspiración?
MR: Raf Simons. Está por delante de todos. Cuando te fijas en sus colecciones de los años 90 te das cuenta de que serían totalmente actuales.
SC!: ¿Podrías decirnos en qué estás trabajando ahora?
Estoy trabajando en nuevos proyectos, cosas nuevas, pero no voy a ser demasiado específico. Los diseños y materiales serán menos experimentales pero tendrán la misma estética. Los productos serán más asequibles y más duraderos.
Galería:
Fotos: Virgili Jubero
Dirección Artístico: David Fanfani
Dirección Creativa: Mats Rombaut
Modelo: Giovanni Leonardo Bassan
Prensa: Florence Teerlinck
Layout por Michael Padilla
