Hasta hace unos años parecía que los altos niveles de polución sólo eran cosa de los países asiáticos, pero la realidad es otra. Actualmente, la contaminación del aire se está convirtiendo en uno de los mayores problemas de Europa o de EE.UU.

Artículo de Isabel Mor, Coolhunter @ the Coolhunting Group para So Catchy! Where Fashion Begins

Aunque muchas personas no son aún conscientes de ello, otras tantas sí lo son, y es por esto, que han aprovechado la oportunidad para crear empresas emergentes destinadas a comercializar máscaras antipolución pero de una calidad y diseño que queda lejos de las típicas máscaras de papel industriales o de cirujano que estamos acostumbrados a ver. El objetivo de estas nuevas compañías es que estas máscaras, ante el problema real de contaminación que existe, sean lo suficientemente cool como para que se conviertan en un accesorio más en nuestros looks diarios.

Parece que la mejor manera de que llegue a implantarse este producto como algo normal en el streetstyle de las ciudades y se convierta en un accesorio imprescindible de nuestro fondo de armario, es convirtiéndolo en algo moderno y con un diseño atractivo.

Airinum

Esto es lo que debió pensar la compañía sueca Airinum, quien a finales de 2015 lanzó una máscara minimalista y elegante a través de la plataforma de crowdfunding Kickstarter, llegando a recaudar más de 65.000 $ por encima de su objetivo de financiación inicial de 10.000 $, y comercializandose en la actualidad en más de 60 países.

Inspiradas en el estilo escandinavo, actualmente en su web se ofrece una línea clásica con cinco estilos para adultos y dos estilos para niños, y una edición limitada realizada en colaboración con otras marcas, artistas y diseñadores.

Hay que recordar además, que dos de los cofundadores de Airinum son Mattias Wiklund, diseñador de la moda masculina para H&M, y Kemal Alidzikovic, quien ha trabajado con marcas suecas como Acne y Haglofs.

O2Today

Otro ejemplo es la startup O2Today, creada a principios de 2016, después de que su fundador pasara varios años viviendo en Asia. Se asoció con el diseñador de productos holandés Marcel Wanders y juntos crearon una máscara suave hecha casi en su totalidad de lana merina de Nueva Zelanda -un material transpirable y antimicrobiano-, y con un diseño discreto.

Vogmask

Cambridge Mask

El precio de las máscaras de O2Today, o de otras de las marcas más reconocidas como Vogmask (con diseños coloridos) y Cambridge Mask Company diseñadas en una variedad de patrones, desde patchwork al diseño militar), dista bastante de las de Airinum (85 $), pues mientras que aquellas tienen que ser reemplazadas, las máscaras de Airinum simplemente requieren cambiar el filtro de microfibra aproximadamente cada 100 horas.

MeHow

 

Los más atrevidos pueden encontrar ya en el mercado las llamativas máscaras de diseño de MeHow. Como sobre gustos no hay nada escrito, a diferencia de las anteriores marcas, ésta se desvincula de la sencillez y discreción, apostando por modelos en forma de mariposa, o de alas, entre otros.

Lumoscura

Dando un paso más allá, nos encontramos con piezas de exposición como la máscara Lumoscura, ideada en 2017 por la diseñadora Stephanie Liu. Esta máscara de diseño elegante y limpio, inspirada especialmente por la naturaleza, fue producida con métodos de alta tecnología como la impresión en 3D. Liu está desarrollando en la actualidad una línea comercial consistente en una máscara transparente con una variedad de correas laterales.

A la vista todo lo anterior, parece claro que las máscaras contra la contaminación se están convertido poco a poco en un elemento más de nuestro nuevo estilo de vida, influenciado por una mayor conciencia con el peligro que para la salud supone la contaminación en las ciudades, y es por eso que la oferta ha de satisfacer el gusto de los distintos consumidores urbanos, pasando del minimalismo a las máscaras con lentejuelas o bordados, donde parece primar el diseño sobre la funcionalidad real de las mismas.

Escrito por Isabel Mor, Coolhunter del Coolhunting Group para So Catchy!

Layout por Michael Padilla